Cuando alguien se pregunta qué hace un abogado mercantil, la respuesta no siempre es sencilla. Mucha gente cree que el abogado mercantil solo se ocupa de conflictos entre socios o de la constitución de sociedades limitadas, pero lo cierto es que sus funciones son mucho más amplias. El derecho mercantil regula gran parte de la vida de las empresas, desde su nacimiento hasta su disolución, pasando por contratos, juntas de socios, ampliaciones de capital o incluso concursos de acreedores.
En mi experiencia personal, llevo más de diez años ayudando a personas y empresas en cuestiones mercantiles. En nuestro despacho somos tres abogados mercantiles, cada uno con una trayectoria distinta, lo que nos permite abordar casos de todo tipo con una visión práctica y complementaria. A lo largo de estos años, hemos trabajado con emprendedores que querían crear su primera sociedad limitada, con pymes que necesitaban asesoramiento en contratos mercantiles y con grandes empresas que atravesaban conflictos entre socios.
¿Qué es el derecho mercantil?
El derecho mercantil es la rama del derecho que regula la actividad económica organizada a través de las empresas. Incluye las normas aplicables a comerciantes, sociedades mercantiles, contratos de empresa, títulos de crédito y procedimientos concursales. En la práctica, significa que cualquier operación relevante de una empresa está vinculada al derecho mercantil: desde la constitución de la sociedad hasta la firma de un contrato con un proveedor.
Funciones principales de un abogado mercantil
1. Constitución de sociedades
Una de las funciones más habituales es asesorar en la creación de sociedades limitadas, sociedades anónimas o cualquier otra forma jurídica. Aquí el abogado mercantil acompaña al cliente en trámites como la redacción de estatutos, el pacto de socios o la elección del modelo societario más conveniente. He ayudado a decenas de emprendedores a constituir su primera sociedad, explicando de manera sencilla los costes, documentos necesarios y pasos a seguir.
2. Redacción y revisión de contratos mercantiles
Otra de las tareas más frecuentes es la elaboración de contratos: contratos de suministro, agencia, franquicia, arrendamiento de local, entre otros. El abogado mercantil garantiza que las cláusulas sean claras y que protejan los intereses del cliente. En mi práctica, he visto cómo un contrato mal redactado puede derivar en litigios costosos que se habrían evitado con un buen asesoramiento inicial.
3. Asesoramiento en juntas de socios
Los conflictos entre socios son uno de los grandes focos de trabajo del abogado mercantil. Aquí entran cuestiones como impugnación de acuerdos, derecho de separación, votaciones en junta o protección de los minoritarios. Más de una vez he tenido que intervenir en sociedades donde los socios mayoritarios intentaban tomar decisiones sin tener en cuenta al resto, y gracias a la ley y a la estrategia jurídica conseguimos equilibrar la situación.
4. Defensa en litigios societarios
Cuando la vía del diálogo fracasa, el abogado mercantil también actúa en los tribunales para defender los derechos de sus clientes. Esto incluye demandas de impugnación, reclamaciones de responsabilidad contra administradores o conflictos derivados de pactos incumplidos. He llevado casos donde el socio minoritario consiguió anular acuerdos injustos gracias a una buena defensa legal.
5. Ampliaciones de capital y reestructuraciones
Otro ámbito esencial son las ampliaciones de capital, fusiones, adquisiciones y operaciones de reestructuración. Aquí el abogado mercantil vela porque el proceso cumpla con la normativa y no perjudique a ninguno de los socios. En mi experiencia, muchas ampliaciones se usan de forma abusiva para diluir a los minoritarios, y es precisamente ahí donde nuestro papel como abogados resulta determinante.
6. Concursos de acreedores y reestructuración de deudas
Cuando una empresa atraviesa dificultades económicas, el abogado mercantil asesora en la presentación del concurso de acreedores, negociaciones con proveedores y bancos, y búsqueda de soluciones que permitan salvar la actividad empresarial. Hemos acompañado a empresas en momentos críticos, logrando acuerdos que evitaron su cierre definitivo.
7. Protección frente a responsabilidad de administradores
Los administradores de sociedades tienen una gran responsabilidad y, en caso de mala gestión, pueden llegar a responder con su patrimonio personal. El abogado mercantil asesora sobre cómo cumplir correctamente con sus deberes y defiende a los administradores cuando son injustamente demandados.
8. Asesoramiento a startups y emprendedores
En los últimos años, con el auge de las startups, el abogado mercantil ha pasado a tener un papel fundamental en la creación de estructuras societarias flexibles, búsqueda de financiación, redacción de pactos de socios y protección de la propiedad intelectual. He trabajado con startups tecnológicas a las que acompañamos desde su primera ronda de inversión hasta su consolidación en el mercado.
El valor añadido del abogado mercantil
Lo que diferencia a un buen abogado mercantil es la combinación de conocimiento legal y experiencia práctica. No se trata solo de aplicar la ley, sino de comprender las necesidades de cada empresa y aportar soluciones realistas. En mi caso, después de más de diez años asesorando en derecho mercantil, sé que cada cliente tiene una situación única y que lo más importante es escuchar y ofrecer alternativas claras.
Casos prácticos de mi experiencia profesional
– Una pyme familiar donde redactamos un pacto parasocial que evitó conflictos a futuro entre hermanos.
– Una empresa de servicios que necesitaba blindar contratos con clientes internacionales. Revisamos todas las cláusulas y evitamos riesgos de incumplimiento.
– Una sociedad limitada con un socio minoritario bloqueado en la junta. Conseguimos que ejerciera sus derechos y recuperara su voz en la empresa.
– Una startup tecnológica que buscaba inversión y necesitaba asesoramiento en la entrada de un fondo de capital riesgo. Diseñamos un pacto de socios equilibrado para proteger a los fundadores.
Conclusión
El abogado mercantil no es solo un jurista que interviene en casos de conflicto. Es un asesor estratégico que acompaña a la empresa en todas sus etapas: desde la constitución hasta la expansión, pasando por la prevención de riesgos y la defensa de intereses. En una sociedad limitada o en cualquier otra forma empresarial, contar con un abogado mercantil es sinónimo de seguridad, previsión y protección jurídica.
Después de más de diez años asesorando a empresas y emprendedores, estoy convencido de que el abogado mercantil es una figura imprescindible. Su papel es, en definitiva, el de un aliado que garantiza que la empresa funcione dentro de la legalidad, minimice riesgos y tenga las herramientas necesarias para crecer y defenderse en un entorno cada vez más complejo.