El mundo empresarial está lleno de oportunidades, pero también de riesgos legales. Muchos emprendedores, autónomos o incluso pymes cometen un error común: acudir tarde al abogado mercantil, cuando el problema ya está encima de la mesa.

La función de un abogado mercantil no es solo “apagar fuegos”, sino prevenir conflictos y asegurar que las operaciones de una empresa se desarrollen dentro de la legalidad, con la mayor protección posible.

En esta guía vamos a ver cuándo es necesario acudir a un abogado mercantil, qué problemas suelen aparecer y cómo este profesional puede ser clave para proteger el futuro de cualquier negocio.

¿Qué hace un abogado mercantil?

El abogado mercantil se especializa en el Derecho Mercantil, rama del derecho privado que regula la actividad empresarial y las relaciones comerciales.

Sus funciones abarcan:
– Asesoramiento en la constitución de sociedades.
– Redacción y revisión de contratos mercantiles.
– Defensa en litigios entre socios o frente a terceros.
– Gestión de conflictos derivados de impagos.
– Representación en procedimientos concursales.
– Asesoramiento en fusiones, adquisiciones o disoluciones de empresas.

En definitiva, es el aliado jurídico de las empresas y empresarios.

Señales de que necesitas un abogado mercantil

Muchas veces, los problemas legales empiezan de forma silenciosa. Estas son algunas situaciones en las que deberías contactar con un especialista en derecho mercantil:
1. Cuando vas a emprender un negocio y necesitas elegir la mejor forma jurídica (SL, SLU, SA, cooperativa).
2. Al redactar contratos con clientes, proveedores o distribuidores.
3. Si un socio incumple acuerdos, bloquea decisiones o quieres revisar un pacto parasocial.
4. Ante impagos recurrentes o deudas difíciles de reclamar.
5. En ampliaciones o reducciones de capital, o entrada de nuevos socios.
6. Cuando vendes o compras una empresa (operaciones de M&A).
7. Si sospechas de irregularidades de un administrador.
8. En caso de quiebra o concurso de acreedores.

Situaciones frecuentes donde acudir a un abogado mercantil

1. Constitución de sociedades: elegir entre SL, SA o SLU afecta a impuestos, responsabilidad de los socios y obligaciones contables.
2. Contratos mercantiles: compraventa, distribución, agencia, franquicia, transporte… Un abogado garantiza seguridad jurídica.
3. Conflictos entre socios: desde el derecho de separación hasta la expulsión de un socio, el abogado mercantil aporta soluciones legales.
4. Reclamaciones de deudas e impagos: actúa con requerimientos de pago, juicios monitorios o procedimientos ordinarios.
5. Responsabilidad de administradores: puede defenderte o ayudarte a reclamar daños.
6. Procedimientos concursales: clave para intentar salvar un negocio o liquidarlo de forma ordenada.

Diferencia entre ir a tiempo y acudir tarde

Acudir a tiempo significa prevenir litigios, redactar contratos blindados, negociar cláusulas favorables y ahorrar dinero.
Acudir tarde suele implicar costes más altos, juicios largos y desgastantes, pérdida de clientes o proveedores, e incluso el cierre del negocio.

Casos reales y ejemplos prácticos

– Caso 1: Una startup sin pacto de socios terminó en litigio cuando uno de ellos se marchó llevándose clientes clave. Un abogado mercantil habría prevenido esta situación.
– Caso 2: Una pyme firmó un contrato de distribución con cláusulas abusivas que le impedían rescindirlo. Un abogado mercantil logró anularlas en sede judicial.
– Caso 3: Una constructora acudió tarde al concurso de acreedores y no pudo reestructurar, solo liquidar.

¿Cuánto cuesta acudir a un abogado mercantil?

El precio varía según el caso:
– Constitución de sociedades: entre 400 € y 900 €.
– Revisión de contratos: desde 200 €.
– Litigios complejos: honorarios según cuantía.
– Concurso de acreedores: desde 2.000 €.

Invertir en asesoramiento suele ser mucho más económico que afrontar un pleito.

Cómo elegir al abogado mercantil adecuado

1. Busca experiencia acreditada en derecho mercantil.
2. Comprueba si trabaja con empresas de tu sector.
3. Valora la cercanía y la comunicación.
4. Pide un presupuesto transparente.
5. Confirma que el despacho tenga equipo multidisciplinar.

Conclusión

El abogado mercantil es una figura imprescindible en la vida de las empresas. Acudir a tiempo puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso.

Ya sea para constituir una sociedad, redactar contratos, resolver conflictos societarios o gestionar un concurso de acreedores, contar con un especialista en derecho mercantil es la mejor inversión que un empresario puede hacer en 2025.

Recomendación final: Si eres empresario o autónomo, no esperes a tener un problema. Ten un abogado mercantil de confianza que conozca tu negocio y pueda asesorarte en cada paso.